Los frijoles son las semillas contenidas en la vaina de la planta que pertenece al género Phaseolus. Corresponden a la familia de las leguminosas junto con la soya, el chícharo, la lenteja, el garbanzo, las habas y las alubias.

Se ha llegado a decir que esta semilla es un paquete completo de nutrimentos sanos, ya que naturalmente es bajo en grasas, en colesterol, alto en fibra, en hidratos de carbono de lenta absorción, y proteínas.

Al respecto, es importante decir que es deficiente en aminoácidos azufrados (metionina y cisteína), que son algunos de los bloques que conforman las proteínas, pero al combinarse con cereales, como el maíz, se complementan y vuelven proteínas completas, de alta calidad.

Agregarlos a los platillos es una manera de hacerlos más saludables, así como cuando les agregamos verduras.

Los frijoles son una excelente fuente de fibra, además de ayudar a la disminución del colesterol. Un estudio mostró que media taza de frijoles pintos cocidos al día significa una disminución de 20 puntos de colesterol en la sangre

Se recomienda consumir frijoles caseros, preparados con cebolla y hierbas que realzan su sabor y agregan nutrimentos.

Te sugerimos remojarlos durante seis horas antes o una noche anterior de la cocción, esto hace la semilla absorba el agua y se disuelvan los almidones que causan malestar intestinal.

No se recomiendan los frijoles enlatados por su alto contenido en sodio y conservadores, sin embargo, si se llega a consumir de manera ocasional, elegir de preferencia los frijoles de olla, ya que los refritos pueden incluir manteca de cerdo, con un mayor contenido de grasa saturada que los primeros y los que se prepararían en casa con aceite vegetal.

Estamos acostumbrados a consumirlos como guarnición, pero hay muchas maneras de incorporarlos a nuestra alimentación diaria, por ejemplo, fríos en ensaladas, en sopas o como parte de algunos guisados, incluso, los protagonistas de nuestros platillos como es el caso de las enfrijoladas, una deliciosa comida que es fácil de armar y queda excelente como desayuno o comida, y complementado con verduras sabe aún mejor.

Ingredientes:

  • 1 taza de frijoles de la olla
  • 1 taza de caldo de frijoles de la olla
  • 1 chipotle adobado (opcional)
  • ¼ de cebolla blanca finamente picada
  • 2 tazas de espinacas cocinadas
  • 1 cucharadita de aceite de oliva extra virgen
  • 1 cucharadita de aceite vegetal (canola de preferencia)
  • 4 tortillas de maíz
  • Queso panela rallado o queso fresco al gusto
  • Lechuga en trocitos al gusto
  • Orégano
  • Sal o sazonador vegetal al gusto

Procedimiento:

  1. Licuar la taza de frijoles de la olla y la taza de caldo para que quede una consistencia de salsa. Si hace falta, agregar más caldo o agua.
  2. Agregar el chipotle y sazonador vegetal o sal al gusto, si fuera necesario.
  3. Calentar un sartén y agregar una cucharadita de aceite vegetal.
  4. Añadir la salsa y dejar que sazone por unos minutos.
  5. En otro sartén agregar un cucharadita de aceite de oliva, sofreír cebolla picada y agregar las espinacas. Sazonar con sal o sazonador vegetal y agregar un poco de orégano.
  6. Calentar las tortillas de maíz, cuando estén blanditas, pasarlas por la salsa de frijoles y posteriormente rellenarlas con las espinacas. Doblar en forma de enchilada.
  7. Agregar más salsa sobre las enchiladas, al gusto.
  8. Decorar con queso panela rallado o queso fresco y lechuga.

Notas:

  • Otra forma de hacerlas es pasar la tortilla por aceite antes de remojarlas en el frijol, esto ayuda a que la tortilla no se rompa
  • Se recomienda acompañar con un jugo verde si es para el desayuno
  • Puedes rellenarlas de huevo con espinacas o alguna otra verdura de tu preferencia
  • También se recomienda rellenar con pollo
Resumen
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Nombre de la receta
Haz unas enfrijoladas rellenas de espinacas para el desayuno
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