Desde hace muchos años la alfalfa es mundialmente conocida por sus increíbles propiedades curativas y nutritivas, es de origen oriental y el día de hoy se consume de muchas maneras. Aquí te diremos cómo puedes empezar a aprovechar esta planta para mejorar tu salud.

La alfalfa es muy conocida en latinoamérica ya que su uso más común es para alimentar el ganado y aves de granja, pero para el organismo humano es una maravilla, en el tallo, las hojas y sus brotes es donde se encuentra la mayor parte de sus propiedades, esta planta es una fuente de vitaminas A, C, E y K, betacarotenos, tiamina, riboflavina, niacina o complejo B, y ácido fólico.

  • Los betacarotenos pueden ser transformados en vitamina A y aportan parte del pigmento de la piel.
  • La tiamina ayuda a la digestión y otros problemas como falta de apetito y colitis.
  • La riboflavina aumenta los niveles de energía, fortalecimiento del sistema inmunológico, el sano crecimiento del cabello, las uñas y la piel.
  • La niacina ayuda a la protección contra las toxinas y los contaminantes ambientales, para disminuir el efecto del envejecimiento, artritis, presión arterial alta y para mejorar la circulación y la relajación.

¡Increible! sin duda es una planta muy noble para el organismo, ahora que sabes que contiene te diré cómo preparar un delicioso jugo de alfalfa para empezar el día con mucha energía y salud.

Ingredientes para un litro:

Una taza de hojas de alfalfa (puedes conseguirla en un mercado popular o tianguis, es muy común y económica) bien lavadas y desinfectadas.

  • Media taza de piña en cubos.
  • Jugo de un limón.
  • 900 ml de agua.
  • Puedes agregar una cucharada de azúcar e hielo al gusto o un tallo de apio.

En la licuadora agrega la piña y la mitad de las hojas junto con el agua, el hielo, el azúcar y el apio si decides ponerle. Empieza a licuar y agrega despacio el resto de las hojas de alfalfa.

Sirve y disfruta.

El germen de Alfalfa: Este es un complemento perfecto para cualquier ensalada de vegetales, incluso puedes comerla sola con limón y sal. Es muy barato y fácil de encontrar en supermercados, tianguis y mercados populares.

 

 

Precaución: Si presentas alergia a alguno de sus componentes o estás embarazada consulta a tu médico antes de consumir la alfalfa.