También conocido como el oro rojo por su alto precio y color, el azafrán es una especia aromática traída de medio oriente.
Desde el antiguo Egipto para dar sabor a las bebidas de los faraones hasta España para darle el característico color amarillo a la paella, el azafrán ha recorrido el mundo culinario por su versatilidad de usos y su sabor, siendo la cocina española la principal consumidora de azafrán en sus preparaciones.
Esta especia es considerada como uno de los condimentos más caros del mundo ya que es poseedora de un inigualable sabor, poco dulce, con un toque amargo y con matices de notas metálicas al paladar, esta valiosísima especia, aporta un sabor distintivo a los platos en los que se ocupa, además de aportar colores vibrantes a los platillos, como lo son el amarillo, rojo y marrón, dependiendo del tiempo de tostado, del triturado y el reposo de la especia en agua o leche.
El uso del oro rojo es realmente sencillo, ya que al ser vendido seco y en hebras o en polvo, solo se debe dejar reposar en agua o leche dependiendo de la preparación, es también de esta manera que podemos darnos cuenta si el azafrán ha sido adulterado, ya que el azafrán natural, tomará de unos minutos para liberar sus tinturas, mientras que el azafrán adulterado pinta inmediatamente el agua o leche en el que se incorporó.
El azafrán puede conseguirse en cualquier tienda de autoservicio en pequeños frascos a un precio promedio que va de los $150 a los $260 dependiendo del gramaje de cada frasco.